viernes, 7 de junio de 2013

Carrera del Agua


Debería haber escrito esta entrada hace ya unos cuantos días. No lo he hecho antes porque, aunque la carrera me fue bien, me he lesionado. No es ningún drama pero no me hace ninguna gracia tampoco, jeje. En cualquier caso, no voy a ser breve como en todas las crónicas que pienso hacer sobre las carreras.

Días previos

Me hacía ilusión correr esta carrera. Inevitablemente le había estado dando vueltas a lo de mejorar mi tiempo. El recorrido era más fácil que la Madrid Rock'n'Roll y además llevaba más tiempo de rodaje. Incluso había logrado hacer varías veces 10 km en los entrenamientos, y había aumentado la velocidad en algunas sesiones. A pesar de algunos parones por otros compromisos, notaba que llegaba bien. Dejé 3 días de descanso antes de la carrera para estar fresco el día de la carrera.

La recogida del dorsal fue un poco pesada porque fui el viernes a las 17:30 y estuve casi una hora esperando. Seguramente fue mala suerte y nos juntamos muchos en ese momento.Mi amigo Luis fue al día siguiente sobre las 16:00 y no había casi cola. Entiendo que haya gente que se queje, pero en este caso creo que no es culpa de la organización. A no ser que se asigne a cada persona un rango de horas, es inevitable que haya colas. La camiseta me gusta. El dibujo que sale en ella debe tener ya unos años porque es el mismo que sale en el cartel de la edición del año pasado y de la de hace dos.

Todo iba bien hasta que no sé por qué me empezó a doler la tibia derecha el día antes de la carrera. No exactamente la tibia, si no por la parte interna, cerca de la tibia, justo encima del tobillo. Me puse hielo y, como iba bien, no le di mayor importancia. Por la tarde tenía algunas molestias, pero el domingo ya me sentía bien, así que supuse que era algo temporal. No estaba nervioso. No me obsesionaba el bajar de marca. Además iba a correr con Luis y me hacía ilusión no correr solo.


La Carrera

Había quedado con Luis en Plaza de Castilla. A pesar de que el servicio de guardarropa estaba mucho mejor organizado que en la Madrid Rock'n'Roll, como el coche de Luis estaba cerca, se cambió de ropa allí y dejó la ropa de abrigo en el coche. Bueno, me estuve riendo un rato con él porque tenía el dorsal cosido a la espalda. Tampoco debería reírme mucho porque yo pego el dorsal con esparadrapo (no quiero estropear la camiseta con imperdibles, jeje) y, luego, como contaré después, esto me dio algún que otro problema.

Ya nos habíamos colocado para salir unos 10 minutos antes. Había buen ambiente. Quizás se veía que había más nivel entre los corredores, ya que está carrera tiene más de 30 años y es un clásico. La temperatura era buenísima para correr, como unos 10º. Aproximadamente un minuto después de oír el pistoletazo de salida, pasamos por el arco. Luis se queda atrás y, aunque estoy pendiente de que no se quede muy atrás, él me dice que siga adelante. Ya habíamos hablado antes que era mejor que cada uno fuera a su ritmo, así que no había ningún problema.

En el primer kilómetro, en la Plaza de la Madre Molas, a un corredor se le cae su móvil, o lo que sea, que tenía enganchado en el brazo. Se le sale la carcasa y la batería allí mismo, en mitad de otros corredores. Ya lo he comentado más veces pero realmente no entiendo esta manía de ir con dispositivos electrónicos a las carreras. No sólo pienso que te pierdes parte de la carrera prestando atención a pulsaciones, tiempos por km, etc.. sino que, en cualquier momento, te puede pasar una cosa de este tipo. Adiós móvil y adiós carrera. En fin...

En la primera incursión en Paseo de la Habana, veo los globos de 50'. Sin prisa pero sin pausa, intento aproximarme a ellos. Sé que si les alcanzo y los mantengo detrás, me aseguraré de bajar de 50 minutos. No es algo que me obsesione, pero tenía la oportunidad de hacerlo, así que, después de pasar por el Kilómetro 1 y antes de terminar Paseo de la Habana, los adelanto. Luego vienen las cuestas de Pío XII y Alberto Alcocer, y las supero más o menos bien. Después hay un trozo de bajada por Paseo de la Habana donde pude recuperar antes de llegar al Bernabéu donde empieza la subida de 2 kilómetros, del 4 al 6, que transcurre por Padre Damián, Rafael Salgado y la Castellana hasta Plaza de Castilla.

La subida no me pareció dura, o al menos no tan dura como creía que iba a ser. En  la mitad del trayecto de la Castellana estaba el avituallamiento. Por fin sustituyeron las famosas bolsas de agua por botellas de agua del Canal de Isabel II, (Luis y yo lo habíamos visto antes de la carrera, cuando estuvimos buscando su coche). No tenía pensado coger agua pero por si acaso se me hacía duro lo que me quedaba de la Castellana, cogí una botella, bebí un traguito y me eché un poco en la cabeza. Este dato es importante, ya lo veréis, jejeje. Tiré la botella medio llena en el contenedor, y casi me choco con otro corredor. Fue culpa mía, y le pedí disculpas, y él amablemente me dijo que no pasaba nada. Ojalá todo el mundo fuera así, porque he visto gente que empuja (sobre todo en la San Silvestre) y encima te mira mal.

Al rodear Plaza de Castilla soy consciente de que me quedan 6 kilómetros y que quizás no vaya tan bien como pensaba. Afortunadamente, esta parte es más bajada que otra cosa e intento regular para llegar bien al final. Hay un tramo de Bravo Murillo, creo que antes del Kilómetro 7, que me parece el trozo con más pendiente de bajada. Allí cojo mucha velocidad, creo que demasiada, inconscientemente. De hecho, empiezo a notar que quizás no estoy pisando bien con la pierna derecha, e intento bajar la velocidad. Este dato también es importante, por desgracia

Cuando llego al Kilómetro 8 veo que el dorsal se me está empezando a despegar. No me di cuenta que, al echarme agua en la cabeza en el avituallamiento, parte del agua se me cayó en la parte delantera de la camiseta mojando el dorsal y el esparadrapo. Primero intento pegármelo con las manos, pero cada vez se me está despegando más. Así que a partir del Kilómetro 9 más o menos, me arranco el dorsal y lo llevo en la mano para asegurarme de no perderlo. En el dorsal está el chip que cuenta el tiempo.

El último kilómetro se me empieza a hacer largo porque ya voy muy justo. No voy del todo mal porque, aunque hay gente que me adelanta, también hay gente a la que adelanto, y hay más o menos un grupo que va a la misma velocidad que yo. En la entrada a las instalaciones del Club deportivo del Canal Isabel II, corro por la parte de la izquierda, aunque sea la del exterior porque tengo la sensación de que el suelo allí está más blando. Tal como había leído en los foros, esta parte se hace larga, y es totalmente cierto.

Cuando salimos de las instalaciones veo la meta y que no queda ya nada. El marcador muestra 48 minutos y unos pocos segundos. Estoy contento porque me parece buen tiempo, Intento ponerme otra vez el dorsal, aunque sea sujetándolo con los dedos, y entro así en la meta. Pensé que iban a colgar el vídeo en Corriendo Voy pero no lo han puesto y no creo que lo hagan. Es una pena. Una vez terminada la carrera, recojo el agua y el Powerade y la naranja, mientras espero a Luis sentado en la meta. Como tenemos Whatsapp es mucho más fácil. Luis llega en el minuto 55, lo cual es un tiempazo, teniendo en cuenta que no ha entrenado mucho y que era su segunda carrera, (en la primera, hace 2 años en Madrid correr por Madrid, había hecho un poco más de 1 hora).

Al final, los tiempos fueron los siguientes: Tiempo oficial 48'16", tiempo neto 46'59". También he visto que en la segunda parte de la carrera la hice en menos tiempo que la primera, (al contrario que la mayoría), lo cual quiere decir que gestioné bien las fuerzas, a pesar de llegar muy justo.



Después cogemos el Metro para ir a Plaza de Castilla a recoger el coche de Luis y tomarnos algo. Quedamos con otro amigo nuestro y le estuvimos enviando whatsapps a Miguel, pichándole por no haber corrido esta carrera. Para Miguel, la Carrera del Agua es muy dura y prefiere correr otras más asequibles como la de Norte contra Sur, jejeje.

Reflexiones (y lesiones)

Me gustó mucho la Carrera del Agua, tanto que seguro que repito el año que viene, aunque espero que para entonces sea en Marzo, y así poder correr la Liberty también. El tiempo que hice es muy bueno para ser yo. Hace unos años me habría parecido prácticamente imposible. Pero todo tiene un precio y creo que la lesión que tengo ahora es consecuencia de ir por encima de mis posibilidades. Y me da rabia porque era algo en lo que no quería caer. Si la lesión fuera por otra causa, no le daría tanta importancia, pero sé que ha sido culpa mía por fliparme.

Cuando terminé la Carrera del Agua y, viendo el tiempo que había hecho, ya estaba pensando en la Norte contra Sur, y en bajar de tiempo. El problema es que quise volver a los entrenamientos muy pronto y la lesión ha venido probablemente por eso, aparte de que estoy seguro que ir tan deprisa en esa bajada justo antes del Kilómetro 7 de la Carrera del Agua también me pasó factura. Los primeros días no lo noté porque tenía un poco de agujetas, pero ya el martes de la semana pasada salí a correr y empecé a notar los dolores el día después. Y el domingo pasado volví a intentarlo porque ya me dolía menos y he tenido otra recaída.

El caso es que hay veces que me duele bastante más que antes y otras en que no me duele casi, o eso creo, porque uno ya se obsesiona y no sabe, jeje. Al principio pensé que podría ser periostitis pero no tengo los famosos bultitos, aparte de que no me duele exactamente en la tibia sino en el músculo que hay debajo. Debería ir al médico, pero también sé que me va a decir que haga reposo. Me preocupa porque a veces me duele al andar, o cuando llevo andando un rato, y eso antes no me pasaba, a pesar de que ya llevo 5 días sin correr. Tendré que tener paciencia. Lo que no sé es si llegaré a la Carrera Norte contra Sur. Es una pena porque también la iban a correr Miguel y Luis, y no tengo tan claro que pueda participar. El verano me vendrá bien para descansar, y si sigo mal, tendré que ir al médico.

Actualizo la entrada para decir cómo me encuentro ahora (sábado 8). La lesión ha mejorado mucho. La combinación reposo, hielo, traumeel y osteoheel funciona bien. Bueno, lo de reposo es relativo porque hago bici estática que me está sentando muy bien, y además es un ejercicio que me gusta mucho. Voy a seguir haciendo esto hasta el día 23 para llegar a la carrera de Norte contra Sur, y me la voy a tomar con mucha calma.

Lo que tengo muy claro es que, a partir de ahora, tengo que tomarme las carreras populares de otra manera. No soy un atleta de élite, bastante tengo con poder correr después de tener las dos rodillas operadas. No tiene sentido intentar bajar permanentemente de tiempo. Y además hay otro dato. Me lo pasé mejor en la Rock'n'Roll Madrid porque disfruté más de la carrera. Lo que no quita que la Carrera del Agua me ha gustado mucho también.


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